Los padres tienen una responsabilidad grande e importante que definirá lo que serán sus hijos y de lo que serán capaces en el futuro. Si algunos padres tuvieran más claro esto tuvieran más cuidado y empeño para con sus hijos.
Los niños no nacen sabiendo, ellos son como esponjas y van absorbiendo e imitando lo que ven en sus hogares, también llegan a la etapa de la curiosidad y prueba, a todo le ponen mano, todo se lo entran a la boca, se ven atraído por algo y van hacia eso, y créanme que así continua hasta la adolescencia.
Es por esto que la misión del padre es enseñarles qué es bueno y qué es mal para ellos, para así evitar que tengan q darse cuenta por ellos mismos con algo lamentable, de ahí que viene la corrección. Vayamos al libro de la vida y la sabiduría, la guía más completa, la Biblia: Debemos esmerarnos en instruir y ensenar buenos modales, valores y costumbres a nuestros hijos, y los mismos permanecerán con ellos a los largos de sus días: Proverbios 22:6 Instruye al niño en su camino; y aun cuando sea viejo, no se apartará de él.
Hay niños que con sólo dejarles notar con nuestra voz alta que está mal algo que no debe hacer, basta para que se acongojen y para evitar que sus padres vuelvan a hablarles así evitan hacer esto sólo pq sus padres le dijeron, ya que sólo la madurez q viene con los años le hará entender de lo que sus padres le libraron, en algunos casos esto no basta y hay que aplicar correcciones más drásticas como quitarle algo que les gusta mucho, y como último recurso, puede darle unas palmaditas en las manos o nalgaditas, sin llegar a los excesos, por el momento si usted le dio una palmadita para que no juegue con la estufa ellos como no se quemaron gracias usted, entenderá que no debe hacerlo para evitar esa palmada.
Proverbios 13:24 El que detiene el castigo aborrece a su hijo, pero el que lo ama se esmera en corregirlo
Todos hemos sido hijos, y yo era una de esas muy rebeldes, a veces pasaba días sin hablar con mi mamá, no me enorgullece decir que en mi adolescencia llegué a decir hasta que la odiaba, pero hoy día entiendo y valoro todo lo que hizo, pues hoy día no la avergüenzo, y soy una persona de bien, que aprendió a trabajar y esforzarse por lo que quiere.
Hebreos 12:11 Al momento, ninguna disciplina parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que por medio de ella han sido ejercitados.
Proverbios 29:15 La vara y la corrección dan sabiduría, pero el muchacho dejado por su cuenta avergüenza a su madre.17 Corrige a tu hijo, y te dará reposo; él dará satisfacciones a tu alma.
Ahora bien, algo que sí le critico a mi madre, y es que siempre estar tara tara tara todo el tiempo, ofender a sus hijos, decir que no sirven para nada es contraproducente, es mas dañino que cualquier golpiza, porque la golpiza pasa el dolor al ratito, pero las palabras hieren el alma y son difíciles de curar, y afecta mucho a la personalidad y seguridad del niño que un día será adulto. Los padres no tienen idea del poder que tienen sus palabras, cuando usted le declara a un hijo que no sirve, que es bueno para nada, que es una basura, hay un alto porcentaje de que en el futuro se convierta en eso, pues el niño se convence de que eso q su madre tanto repite es lo que es. La biblia habla de eso, no recuerdo la cita, pero vista desde el punto cristiano, usted le está hechando maldiciones a su hijo y le está condenado a ser eso, tengalo muy presente…
Recuerden una acción da una reacción, a veces los padres se pasan y discuten por cualquier tonterías que bien podrían resolver pidiéndolas amorosamente. Los padres tienen que dar lo que exigen, si exigen respeto también deben de darlo a sus hijos que también lo merecen. Deben aprender a decir lo siento, me excedí. Las tensiones o problemas maritales no los descargue sobre sus hijos. Hay veces que por ser padres creen que todo lo que les hagan a sus hijos está bien y no siempre es así. Y por eso como cualquier ser humano o animal, el hijo buscará la forma de defenderse y será interpretado por su padre como una falta de respeto.
Dios sabe esto y por eso en la palabra dice:
Efesios 6:4 Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en la disciplina y la instrucción del Señor.
Para concluir, no soy madre aún, aunque anhelo hacerlo, creo que de mi propia experiencia como hija he de aprender mucho. Ya sabe, hijo fuiste y padre serás.